Vivienda unifamiliar aislada resuelta en planta baja, donde el jardín es el impresionante telón de fondo para todo el interior.
Una arquitectura que absorbe la naturaleza y, desde el amplio salón exterior o desde detrás de los cristales, plácidamente la contempla.
El diseño de la vivienda ofrece un ambiente limpio y sereno y una gran funcionalidad. Cada una de las piezas que la compone guarda conexión con el resto, manteniendo su independencia.
Los grandes ventanales permiten que la luz natural inunde cada una de las estancias y brindan una conexión total con el entorno.
Dispone de garaje cubierto con capacidad para dos vehículos. La zona de día (cuarto de lavado, despensa, cocina y salón-comedor) está perfectamente diferenciada de la zona de noche (habitaciones y baños).
Dado que los 800 m2 de parcela son completamente edificables, cabe la posibilidad de tener una bodega y piscina en el jardín como espacio adicional a la vivienda.